Bienvenidos a bordo

y gracias por acompañarme en este largo viaje sin retorno que es el de la maternidad. Me río yo de las peripecias de Ulises y de la paciencia de Penélope. Me río de los 12 trabajos de Hércules... ser madre sí es toda una aventura, a veces desesperante, casi siempre agotadora... pero siempre, siempre, siempre ¡tan gratificante! ¿queréis compartirla con mi familia?

domingo, 22 de marzo de 2009

Bye bye from Susi

Vaya, nunca lo hubiera imaginado, pero sí, este mismo viernes recibí un email con este título y una larga carta adjunta en la que una clienta nos comunicaba que dejaba el trabajo. Los motivos particulares no vienen a cuento pero el caso es que ha decidido retirarse durante un tiempo para dedicarse a sus hijos. 

Es curioso como a veces en un breve periodo de tiempo todo parece llevarte hacia una misma dirección. No, no, no es que esté pensando en dejar mi trabajo, ni siquiera temporalmente... pero ¿sabéis? éso mismo decía ella, que si alguien le llega a decir hace tan sólo un par de días que iba a tomar esa decisión, se habría reído a carcajadas y le habría tachado de loco. Y sin embargo, las cosas cambian y a veces una circunstancia puntual se convierte en detonante de algo mucho más gordo. 



Y el caso es que me ha dado que pensar, porque yo soy lo más alejado de la perfecta ama de casa que conozco, lo sabéis... detesto las tareas domésticas y además tengo una tolerancia bastante grande al desorden así que con los impagables (es un decir) servicios de mi Mamen, que me mantiene la casa en un estado mucho más que aceptable, me doy por satisfecha. Y sin embargo, reconozco que hace poco sí hubo un día en que tuve una reacción extraña en mí. Volvía a casa cansada del trabajo y me la encontré quizás más desordenada de lo habitual, aunque tampoco mucho, ya os digo que ésto es el prototipo de lo que siendo amable se suele llamar una casa en la que se vive, no de catálogo. Pues sí, aquí se vive, y mucho... y además cuando yo salgo de casa mis hijos todavía están acabando de desayunar para ir al cole con algún abuelo, lo que implica que nunca sé exactamente en qué estado me encontraré la casa cuando llegue por la tarde. 

Aquél día no sé por qué me molestó el desorden, y me sorprendí a mí misma pensando en cómo me gustaría disponer de tiempo para organizar yo misma la casa a mi gusto cada mañana al salir de casa... ¡¡¡yo!!! no había terminado aún de pensarlo y ya estaba sorprendida de que semejante idea hubiera cruzado mi mente, y sin embargo la cruzó. No fue más allá. 

Y unos días más tarde, hablo con Susi y me cuenta lo contenta que está de haber tomado esa decisión, de poder dedicar más tiempo a sus hijos... por supuesto cada uno es cada uno y sus circunstancias, y las suyas en este momento no tienen nada que ver con las mías... pero el caso es que la idea volvió a cruzar por mi cabeza.

Sabéis que soy una ferviente buscadora de mi propio equilibrio, que necesito que trabajo, vida familiar y vida privada estén al menos razonablemente compensadas... y el caso es que últimamente pienso que no lo están. Tampoco esto es nuevo, ya hace meses que tuve otra época turbulenta en este sentido, quiénes me seguís desde hace tiempo quizás lo recordéis... igual es simplemente la primavera, que la sangre altera como todo el mundo sabe... o una simple sucesión de casualidades, causalidades, circunstancias e incongruencias varias. O igual es cierto que ha llegado el momento de hacer algunos cambios en mi vida... 


18 comentarios:

Anónimo dijo...

YO siempre pienso que necesitaria tener dos vidas: una para estar contenta con lo que dedico al trabajo y otra para estar contenta con lo que dedico a la familia. Al final tengo la sensación de estar haciendolo mal o insuficiente en los dos frentes. En casa, empezando por no decidirme a darle un hermanito a Sara, cuando me da una tristeza inmensa pensar en que pueda ser hija sola. Y en el curro, cuando cada vez más tengo que decir "no es posible" o "hoy no, tendrá que ser mañana" ante ciertas exigencias de ciertos clientes.
Por eso cuando veo a gente que puede tomar la opción de dejar el curro para dedicarse a su familia... me muero de envidia. Porque yo no puedo.

Unknown dijo...

Yo reduje mi trabajo a media jornada cuando nació mi hija mayor y lo dejé cuando llegó mi hijo.

Detesto la casa, ni siquiera entonces la tuve como correspondía al haber decidido dedicarme por entero a la vida familiar, fue una decisión que tomé exclusivamente por mis hijos y por mí, por nosotros. Tenía clarísimo que esa era la manera en la que quería que pasaran sus primeros años, antes de empezar a ir al colegio (de aquella me planteé no llevarlos hasta los 6 años e incluso valoré la educación en casa), tal vez porque yo no tuve a mi madre conmigo (trabajaba fuera de casa) y la añoré muchísimo. Quería darle a mis hijos lo que yo no había tenido.

No me arrepiento nada. Hice lo que me pidió mi interior y creo que acerté. Mis hijos lo han agradecido, yo estuve satisfecha con mi inquietud -fui coherente- y eso me ha permitido luego afrontar la vuelta a la actividad laboral con muchas ganas, valorándola también mucho más.

Si tienes dudas, mira dentro de ti. Es donde están todas las respuestas. Aunque no siempre es sencillo ver.

Un beso grande, grande.

Lamamma dijo...

hmmm, creo que me he expresado fatal, pero vamos, es normal, con la empanada mental que llevo encima, como para explicarla bien... pero vamos, resumiendo... no, mi equilibrio no pasa en ningún caso por dejar el trabajo, ni siquiera por reducir mi jornada. Más bien al contrario, necesito un trabajo que me exija mucho más que el que tengo ahora... la cuadratura del círculo, sí... pero de momento necesito eso, y luego equilibrarlo de nuevo con los otros dos aspectos de mi vida... no, no es tan difícil...

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con Elena-Z, y es que al igual que ella, me encantaría poder dar una hermanita al peque, pero mi trabajo hace que trabaje mañana y tarde. Una reducción de jornada.....puff, en este momento por el que atraviesa el país lo veo totalmente inviable, y dejarlo por completo, prácticamente imposible si quiero llegar a fin de mes con todos los recibos pagados. Con el sueldo de mi pareja solo, después de pagar piso, coche, recibos, comida...etc, tendríamos para comer pipas a partir del día 15. Mi sueldo es mucho mayor que el suyo, así que no es viable. Por ello, envidio enormente a tu compañera y a todas las mujeres que se pueden tomar el lujo de dejar el trabajo una temporada para estar con sus hijos. Yo ahora no, y creo que tampoco en un futuro cercano. Total, que se me está pasando el arroz de otro niño, que seguiré trabajando igualmente....para dos dias que estamos en esta vida, nos pasamos uno queriendo otras cosas...En fin, así tendrá que ser.
Besos. BB
P.D. La opción de que mi pareja se quedara en casa...podría ser, pero él es funcionario, y...alguien renunciaría a una plaza así hoy en día???? Total, él no puede tener otro niño, jaja.

Anónimo dijo...

Me llegó esto en forma de email el día 8 de marzo. Algo de razón no le falta.

Son las 6.00 a .m. , El despertador no para de sonar y no tengo fuerzas ni para tirarlo contra la pared. Estoy acabada. Quiero quedarme en casa, cocinando, escuchando música, cantando, etc. Todo, menos salir de casa, meterme en el auto y tener que poner el cerebro a funcionar.
ME GUSTARÍA SABER QUIÉN FUE LA BRUJA IMBÉCIL, LA MATRIZ DE LAS FEMINISTAS, QUE TUVO LA GRANDIOSA IDEA DE REIVINDICAR LOS DERECHOS DE LA MUJER, Y POR QUÉ HIZO ESO CON NOSOTRAS, QUE NACIMOS DESPUÉS DE ELLA.
Estaba todo tan bien en el tiempo de nuestras abuelas: ellas se pasaban todo el día bordando, intercambiando recetas con sus amigas, decorando la casa, podando árboles, plantando flores, recogiendo legumbres de las huertas y educando a sus hijos. La vida era un gran curso de artesanos, medicina alternativa y cocina.
Y DESPUES SE PUSO MEJOR, TENIAMOS SERVIDUMBRE, LLEGO EL TELEFONO, LAS TELENOVELAS, LA PILDORA , LA TARJETA DE CRÉDITO!!! CUÁNTAS HORAS DE PAZ!!!! HASTA QUE VINO UNA TARADA, A LA QUE POR LO VISTO NO LE GUSTABA EL CORPIÑO, NI DEDICARSE AL HOGAR. VINO A CONTAMINAR A VARIAS OTRAS TONTAS QUE SE PENSABAN REBELDES, INCONSECUENTES, CON IDEAS RARAS SOBRE 'VAMOS A CONQUISTAR NUESTRO ESPACIO'. ¡QUÉ ESPACIO NI QUÉ DIABLOS!!!
Si ya teníamos la casa entera!!! todo el barrio era nuestro, el mundo a nuestros pies!!! Teníamos el dominio completo sobre los hombres; ellos dependían de nosotras para comer, vestirse...Y ahora... ¿dónde carajos están?
Acabamos muertas al final de cada día, ni hacer el amor queremos, nos duele la cabeza, argumentamos mil excusas por cansancio...
NUESTRO ESPACIO????... Ahora ellos están confundidos, no saben qué papel desempeñan en la sociedad, HUYEN DE NOSOTRAS, COMO EL DIABLO DE LA CRUZ , LES DAMOS MIEDO, TANTA INDEPENDENCIA ACABO POR HACERLOS HUIR!!!
Ese tonto feminismo acabó llenándonos de deberes. Y lo peor de todo, acabó lanzándonos dentro del calabozo DE LA SOLEDAD CRÓNICA AGUDA!!!
¿Por qué, díganme por qué, LIBERACIÓN FEMENINA????...sí la mujer sólo necesitaba ser frágil y dejarse tratar como a una reina, y le dió por competir con los machos...
MIREN EL TAMAÑO DEL BÍCEPS DE ELLOS Y MIREN EL TAMAÑO DEL NUESTRO. ESTABA MUY CLARO, CADA QUIEN EN SU SITIO DESDE ADAN Y EVA....LIBERACIÓN FEMENINA...ESTO NO IBA A TERMINAR BIEN!!!
No aguanto más ser obligada al ritual diario de intentar estar flaca como una escoba, pero con tetas y culo duritos, para lo cual tendría que matarme en el gimnasio, además de morir de hambre, ponerme hidratantes, antiarrugas, padecer complejo de radiador viejo tomando agua a todas horas, y demás armas para no caer vencida por la vejez, maquillarme impecablemente cada mañana desde la frente al escote, tener el pelo impecable y no atrasarme con las mechas, que las canas son peor que la lepra; elegir bien la ropa, los zapatos y los accesorios, no sea que no esté presentable para esa reunión de trabajo, tener que resolver la mitad de las cosas por el celular, instalarme todo el día frente al PC trabajando como una esclava (moderna, claro está), con un teléfono en el oído y resolviendo problemas uno detrás de otro, que además ni son mis problemas!!!
Todo para salir con los ojos rojos (por el monitor, claro, porque para llorar de amor no hay tiempo). Y mira que teníamos todo resuelto!!!
Estamos pagando el precio por estar siempre en forma, sin estrías, depiladas, sonrientes, perfumadas, uñas perfectas, sin hablar del currículum impecable, lleno de diplomas, doctorados y especialidades.
NOS VOLVIMOS 'SÚPER MUJERES' . PERO ELLOS SE QUEDAN CON LOS PUESTOS DE JEFES Y NOS DAN ÓRDENES!!!
¡¡¡BASTA!!!
Quiero que alguien me abra la puerta para que pueda pasar, que corra la silla cuando me voy a sentar, que me mande flores, que me haga sentir valorada y querida. Si nosotras ya sabíamos que teníamos un cerebro y que lo podíamos usar. ¿¿Para quééééé había que demostrárselo a ellossssssss??

Ay, Dios mío, son las 6:30 am y tengo que levantarme... ¡Que fría está esta solitaria y grandísima cama!...CARAJO!!!!...quiero que un hombre llegue del trabajo, que se siente en el sofá, que disfrutemos de una cena juntos, que me haga el amor, que me haga sentir mujer... porque descubrí que es mucho mejor servirle una cena casera que atragantarme con un sándwich y una coca-cola Zero mientras termino el trabajo que me traje a casa.
No, mis queridas colegas, inteligentes, realizadas, liberadas...y abandonadas y lo peor aun algo jovenes!. ESTOY HABLANDO MUY
SERIAMENTE... RENUNCIO A MI PUESTO DE MUJER MODERNA

Anónimo dijo...

Yo también me he planteado dejar el trabajo para dedicarme a mi hija. Pero, es una idea que he terminado rechazando porque el trabajo que realizo me encanta, he luchado mucho para conseguir la plaza que tengo y sé que si lo dejo acabaré arrepintiéndome y no quiero acabar recriminándole a mi hija lo mucho que "he sacrificado por ella"...
De momento, creo que nos vamos apañando bastante bien. Tengo un horario que me permite llevar a mi hija a la guardería por las mañanas y por la tarde, aunque la recoje mi madre, yo estoy con ella un tiempo que me permite paseo y estar con ella para el baño y la cena.
Sin embargo, a veces tengo que viajar por cuestiones de trabajo y estar fuera unos días....es cuando se me hace más duro.
Por otro lado, respecto al texto de Espontánea...creo que la "gracia" del asunto es que cada mujer pueda decidir libremente si quiere ser ama de casa o trabajar fuera...
Yo, personalmente, sé que ser ama de casa a tiempo completo me acabaría cansando y no sería feliz. Eso sí, me parece perfecto que haya mujeres que sí les guste y puedan dedicarse a ello. Repito que lo mejor es poder escoger.

Anónimo dijo...

ha sido un tema q hemos tocado numerosas veces,yo la verdad es q no tengo todas esas sensaciones de las q hablais,y desde luego no envidio nada la vida q llevaban mis abuelas(q tuvieron las 2 la suerte d tener un buen marido),pero vivir como ellas, pues no.M gusta trabajar,m gusta llevar una vida d "mujer moderna" como alguien ha dicho antes, si por moderna se entiende trabajar fuera d casa, disponer d tu sueldo , irme a cenar con mis amigas cuando m apetece,querer estar guapa y disfrutando poniéndome guapa,para mi no es ningún suplicio querer estar lo mejor posible, no voy a machacarme a ningún gimnasio,no pretendo estar espectacular sólo lo mejor posible dentro d mis posibilidades,ante todo m arreglo para mi,no para los demás,eso no m impide disfrutar plenamente d mi maternidad.No tengo esa sensación d "sentirme estafada" como dicen algunas personas pq ahora resulta q trabajamos dentro y fuera d casa tb.M madre siempre trabajó,y eso nunca ma ha afectado,quizás pq era funcionaria y por las tardes sí estaba con nosotras,pero por la mañana nos llevaba una sra. ( a la q adorábamos ,bendita sra.benita estés donde estés) al cole,jamás tuve la sensación d q mamá nos dejaba ni m sentí mal por ello,y tengo claro q fue mamá quien m crió,nadie más.Y espero q mi hija tenga la misma percepción q yo tuve.besitos a todas

Anónimo dijo...

Ay chica, y es que no se puede remedira, al final el instinto mamífero nos pide que les dediquemos algo de tiempo verdad? Yo que siempre era super-feminista, mi idea era de repartir la baja maternal con el marido, 2 meses yo 2 meses tú, y al final de eso nada monada. Que para disfrutar de darle la tetita tengo que estar yo. Una de las cosas que hice fue la reducción de jornada, y reconozco que ha sido un acierto. No sé como explicarlo, pero siento que para mis hijas es bueno, siento que si no fuera así les faltaría algo, a ellas y a mí. En estos tiempos de crisis, en que el curro de mi marido va fatal, una opcion que hemos barajado es yo trabajar otra vez las 8 horas. Y sólo de pensarlo... me salen sarpullidos, pienso que me moriré de pena, al menos al principio, no iré a llevarlas a la piscina, ni al parque, no las regañaré, no les daré la merienda... UUUFFF Se me hace muy cuesta arriba sólo de pensarlo. No podría dejar mi trabajo pq me encanta, me siento "realizada" con él, los aviones eran la pasión de mi vida, y aquí estoy, trabajando con ellos, aunque luego pudiera encontrar algo para ir tirando, no sería lo mismo, el dinero no lo es todo, me gusta ESTE trabajo, aunque sea un rollo que esté a 30km de mi casa. En fin, en esto creo haber encontrado tu famoso equilibro, bueno, mejor dicho no, pq cuando estoy en el curro pienso que si viniera por las tardes haría muchas más cosas y tal vez se me valoraría más, pero sabes qué? que estoy bien así, mis 5 horas maravillosas de un trabajo que me encanta y luego mis tardes con las niñas a las que espero no tener que renunciar.

Misteriosa

Anónimo dijo...

Sí, es cierto que de esto hemos hablado muchas veces y lo que te rondaré, morena. Yo era de las que creían firmemente en mi futuro profesional y que era totalmente compatible con formar una familia. Luego llegó la cruda realidad, mis niñas necesitan a su mamá y mamá necesita a sus niñas. Cada vez menos, eso es cierto. Sólo a toro pasado veo que fue un error dejarlas tan chiquitinas en la guardería. La guardería no les aportó nada, con cuatro meses, sólo virus y rotavirus. En el trabajo sólo llegas a algo si estás diez horas al día y el resto localizable. Al menos en mi sector.
Me siento estafada, sí. Toda una vida oyendo que las mujeres podemos hacerlo todo y no es cierto. Sólo podemos si alguien hace el papel de madre. Y la casa también necesita su tiempo. Cuando ví ese texto pensé “uf, qué alivio, no soy la única”
Aunque, por otro lado ¡la de cosas que ha dejado de hacer mi madre por dejarlo todo recogido!
Lammama ¿en qué cambios estás pensando? ¿A estas alturas vas a pedir una media jornada?

Lamamma dijo...

Uff, no, no, siento haberos llevado a confusión. No, no estoy pensando para nada en reducir jornada. Mi equilibrio no pasa por ahí. Espontánea, el texto que has puesto a mí todavía me pone los pelos de punta. Yo sigo pensando en la posibilidad de compatibilizarlo todo y desde luego no estoy ni medio preparada para sacrificar mi carrera laboral. Tampoco estoy dispuesta a hacer cualquier cosa por ella, por supuesto.

El problema ha sido que mis dedos han ido más rápido que mi mente y en el texto de ayer me dejé muchas cosas en el tintero. Lo de Susi ha sido solo un detonante más para hacerme pensar en cosas. Sí que necesito algunos cambios, pero no en el sentido en que estais pensando.

También mi madre trabajaba fuera, sigue haciéndolo, y nunca he tenido la sensación de que me faltara. Tampoco yo tengo la sensación de estar faltándoles a mis hijos. Quizás esté equivocada, no lo sé, pero ni siquiera estoy segura de que ellos agradecieran estar mucho más tiempo conmigo. En esto, como en otras muchas cosas, valoro más la calidad que la cantidad. He conocido mamás ocupadísimas laboralmente que se dedicaban mucho mejor a sus hijos que otras siendo amas de casa. No creo que tenga demasiado que ver. Hace falta algo más que tiempo para dedicarse adecuadamente a los hijos.

Anónimo dijo...

Una frase de espontanea me ha hecho pensar en algo que pienso ultimamente. Y es que hace 30 años, nos quisieron hacer creer que podíamos con el trabajo y con la casa (la famosa doble jornada). Suerte que al final muchas optamos por buscar a alguien que al menos haga unas horas en la casa, pq vimos que no es verdad. Pues a veces pienso que ahora nos quieren hacer creer que tener niños es equivalente a no tenerlos:

-Si estás embarazada puedes hacer de todo (eso es lo que te dicen,pero según que embarazo te toque esto no es verdad, a pesar de que el embarazo en sí no sea una enfermedad): A veces puedes y a veces no, y de todo no (ej: cargar pesos no, luego está claro que es una situacion diferente)

-El parto, total con epidural ni te enteras: O sí, si está mal repartida y te da problemas, y aunque vaya bien, para cuando te la ponen, ya te has enterado de mucho.

-El bebé se puede criar igual con bibes, que es lo mismo: PUes no es lo mismo, pq con lo vaga que soy yo en casa, solo me faltaba tener que fregar y esterilizar los bibes, y no poder meterme a la peque en la cama y seguir durmiendo yo mientras ella mama. NO, no es lo mismo, (no pretendo criticar ni ofender a quienes dan bibes, solo digo un hecho objetivo, y es que no es lo mismo)

-Por supuesto,luego enseguida lo que cuenta es: recuperar la línea, volver a trabajar, salir con las amigas, ¿y el bebé? Ya lo cuidará el padre, la abuela, la niñera, la guardería. Lo importante es llevar la misma vida de antes.

Esto sí me parece una estafa. NO es lo mismo tener niños que no tenerlos. Si llevas la misma vida de antes, es que te estás perdiendo la infancia de tus hijos. Si los atiendes, es pq no llevas la misma vida que antes. ¿Qué opinas lamamma?

misteriosa

Lamamma dijo...

no, claro que no es lo mismo, por eso hay que volver a equilibrarlo todo.

Anónimo dijo...

Pues yo aun me siento culpable por no haber podido cogerme un año de excedencia, la envidia que le tenía a mis vecinas de poder estar todo el día con ellos, por circunstancias cogí reducción de jornada, pero el año que pasamos con bronquitis constantes no lo paga ningun trabajo y echando la vista atras, ojala me hubiera dedicado solo a ella, ya no es solo que tu niña te necesita, es que tú necesitas a tu niña, por lo menos en mi caso, igual fue pq mi madre solo se ocupo de nosotros y eso lo tengo grabado, pero creo que cuando son pequeñines necesitan mucho a sus papis y estar para cualquier cosa o cuando llegan al cole y hay tantas cosas para poder ir a verles, los nenes que sus papis no pueden ir se les nota en la cara, la carita de mi niña cuando te ve entre la gente NO TIENE PRECIO.

Lamamma dijo...

Ángeles, cada uno tiene que encontrar su propio equilibrio, y éste es distinto para cada persona. Yo jamás me habría cogido un año de excedencia, y jamás he pensado que debería haberlo hecho. Pero eso sólo vale para mí, por eso, como apuntaba Celia, lo importante es poder elegir. Tanto hombres como mujeres. También hay hombres que son más felices sin trabajar y ejerciendo de padres y amos de casa. Y tampoco ellos tienen fácil su decisión. Al final lo importante es que cada hogar se organice de la mejor forma posible según sus ideas y posibilidades, y sobre todo no pretender imponer a nadie un único modelo. Opciones hay miles, cada cual debe encontrar la que mejor le siente, o hacerse "el traje a medida" si puede.

Anónimo dijo...

Verás, en mi caso usé mi libertad para alejarme de mi tribu y fundar un hogar lejos de ellos. No se me había ocurrido que eso precisamente anularía mis aspiraciones laborales.

Sigo teniendo curiosidad por saber en qué tipo de cambios estás pensando. Por supuesto, eres libre de contestar.

Anónimo dijo...

yo es q valoro más la calidad q la cantidad,m explico:una d mis mejores amigas redujo su jornada laboral para estar con sus hijos, pero luego resulta q lo deja llorar en el cochecito o por la noche"pq lo q quiere es brazo",joder ,pues cogelo! (pienso yo,apreciación totalmente personal,pues cada uno a sus hijos los educa como quiere),pero son cosas q bajo mi punto d vista no alcanzo a comprender,yo nunca dejaría d trabajar ,pero cuando estoy con mi hija la abrazo y la achucho a más no poder,¿q la malcrio o malacostumbro?bueno, si se ve así,cosa q yo no comparto la verdad es q no m importa,ha sido mi forma d criarla y volvería a hacer lo mismo,se ha dormido en mis brazos,y ahora lo continua haciendo a mi lado en el sofá viendo los dibus un ratito despues d cenar o leyéndole un cuento ..¿q sería más "didáctico" leerle un cuento y q se durmiera luego sola?bueno,para algunas madres quizás si, para mi no,no m importa estar con ella hasta q cierre los ojitos¿q estoy cansada?si,pero para mi no hay descanso mejor q pasar esas horas con ella.No tengo ninguna duda q cuando tenga 15 años ya no querrá pasar tanto tiempo pegada a mi, así q voy a disfrutarlo a tope,jamás la dejé llorar pq quisiera mis brazos o mi compañia,ni el cochecto, ni en la cama ni en el parque.Para mi las horas q paso con ella son oro, d la misma forma q he comprendido lo importante q es prestar atención a las cositas q m cuenta y jugar con ella un rato,por eso valoro tanto q se quede en el comedor, ese ratito del mediodía tendría q comer rápido,no podría hacer apenas siesta,no podría prestarle atención, yo iría d culo...y ahora tengo tiempo para comer tranquila , hacer tareas como planchar o sacar el polvo, o dejar la cena preparada y por la tarde y noche puedo estar por ella.Con todo esto quiero decir q no siempre el pasar mucha cantidad d horas es igual a calidad.besitos a todas.

Anónimo dijo...

Yo creo que todas o la gran mayoria de las mujeres que tenemos hijos nos hemos planteado como seria dejarlo todo para poder criar a nuestros hijos a jornada completa. Yo siempre he dicho que trabajaria a media jornada en cuanto tuviera un hijo, pero la vida a veces no es tan facil y cuando el dinero hace falta no se puede.
Ahora que mi hija tiene 20 meses y que hay veces que pienso que me gustaria darle un hermano (porque yo soy hija unica y no me gustaria que ella tambien lo fuera) pienso que trabajando a jornada completa es imposible.
Yo solo cuento con la ayuda de la guarderia y de mi suegra, y creo que tener otro para que tambien me tengan que ayudar es un rollo, y me hace sentir culpable.
En este dilema estoy. Y encima mi marido no quiere más niños....
Que dificil es esto de tener trabajo, casa, hijos y marido....

Cynthia.

sara dijo...

Llegó tarde a este post, pero me gustaría comentar, que aunque es verdad que a veces es imposible compatibilizarlo todo, yo creo que no podría vivir sin trabajar, para mi es un espacio personal, que me hace ser una persona independiente e individual de mi familia, y creo que eso es necesario para poder darles a los míos lo mejor de mi. Es mejor calidad que cantidad. Yo lo comprobé en la baja de maternidad, me ponía de muy mal humor, todo el día en casa, sin tratar con otros adultos, en fin, en mi caso no funcionó. Un beso

Seguidores