Pero ¿sabéis? no hay mejor casa de los espejos que la realidad. Se me ocurren dos ejemplos. El primero, más frívolo, así como para romper el hielo: los espejos de las tiendas de ropa. ¿Habrá alguno que te devuelva tu verdadera imagen? y eso que da gusto probarse, claro, te ves monísima con cualquier cosa, pero anda, sal luego a la calle...
Hmmm... no, que no iba por ahí este post... No, lo que realmente me ha llevado a escribirlo ha sido darme cuenta de que mi propia casa es una atracción de feria y mis hijos los espejos deformantes que tanto me han gustado siempre. Supongo que todos nos sentimos más o menos reflejados en nuestros descendientes. Son sangre de nuestra sangre, y se podrán parecer más a una u otra rama de la familia, pero normalmente siempre tienen cosas de las dos partes. En nuestro caso, Sofía es mi espejo y Guille el de mi marido. Pero, como decía, son puros espejos deformantes.
Todo esto viene a raíz de un pensamiento que me ha surgido viendo a Sofía hablar con su bebé (que por cierto, se llama Guille, como su hermano, y el bebé de su hermano también se llama Guille... y menos mal que no tenemos perro que si adivinad qué nombre le pondría...) Sofía tiene el mismo genio endiablado que yo, la misma cabezonería pétrea. Pero cuando habla con su bebé le sale una dulzura que, francamente, no reconozco como mía, ni tampoco de mi marido. A ver, que no es que seamos unos ogros tampoco, pero la verdad, dulces, dulces... y menos hablando... Como diría una buena amiga mía, debe de ser el cierzo, que endurece mucho, jajajaja. El caso es que la estaba escuchando preguntarle a su muñeco si quería hacer no sé qué, toda algodón de azúcar ella: "¿sí? ¿quieres?" y me estaba viendo en ella exactamente así, como en un espejo deformante. Aparte de la obviedad de que es más bajita y más delgada que yo, es una versión desfigurada de mí misma. Con la cabezonería en estado más puro por la falta de experiencia y la moderación que, a la fuerza, te da el tiempo; con la sensibilidad a flor de piel, sensibilidad que yo no es que haya perdido pero sí he limado bastante; y lo más extraño, con esa dulzura que yo no recuerdo haber tenido nunca pero que probablemente solo dejé olvidada en alguna parte, en algún momento.
Muchas veces me han dicho que Sofía es un calco mío, y hasta hoy mismo yo también lo creía. Pero hoy he descubierto que no, no es mi calco, es mi particular espejo. Espejo en el que mirarme, reconocerme, analizarme, espejo que podría ayudarme a recuperar muchas cosas, a mejorar otras...
Pensad en ello y contadme, ¿os véis reflejad@s en vuestr@s hij@s?
30 comentarios:
Me ha gustado mucho como has explicado el parecido de carácter con nuestros hijos. Bonita reflexión.
Mi hija tiene dos años y físicamente es una mezcla entre su padre y yo. Pero el carácter y el genio es herencia de mi familia (tiene cosas mías, de mi hermano e incluso de mi abuela!!)...aún así, ella es una persona singular en la que los parecidos han construido su verdadero ser. Sí, me puedo ver reflejada en ella...pero diferente, deformada....
pues estoy muy, pero q muy d acuerdo contigo.Mi hija sólo tiene 3 años y ya creo q es mejor q yo, en cuanto a sentimientos,ternura,alegría...,veo en ella muchas d las cosas q a mi m gustaría tener,y eso q se parece mucho a mi en el caracter pero "muy mejorada" jaja.Es tímida como yo, muy reservada exceptuando cuando está en "petit comité" q se desmelena(como yo),con lo pequeña q es ya es muy selectiva con sus amistades,veo claramente q se lleva mucho mejor con las q son como ella y no tanto con las q son más "echadas palante" q a veces la ponen nerviosa, no le gustan nada los mogollones d gente ni mucho jaleo, se pone d mal humor(como su madre),tiene bellísimos sentimientos,he notado q alguna vez q se ha dado cuenta d q su padre y yo estamos enfadados y se porta d forma conciliadora "venga mama",y nos ha avergonzado d una forma terrible q una criatura d 3 años se porte d esa forma tan madura y nos de a su padre y a mi semejante lección d conocimiento.Tengo muy claro q aunque m gustaría q fuera ingeniera(por decir algo)será lo q ella decida ser y la apoyaré en todo lo q decida emprender en la vida,cosa q yo en su momento no supe hacer ni tampoco recibí ese apoyo por parte d mi padre(aunque ahora q soy madre lo entiendo), q siempre quiso q yo fuera abogada,así q mis sueños d ser una artista y vivir d ello se quedaron en eso.Quiero q viaje mucho y q vea mucho mundo .Quiero q haga todo lo q yo no hice, así q si , desde luego es el espejo en el q quiero verme reflejada,no por ello quiero hacer lo q hacen algunos padres , q es descargar en sus hijos todas sus frustraciones y por esa causa a veces son exigentes con ellos, no, sólo quiero q sea feliz , muy feliz, con lo q ella decida,q sea una persona preparada, culta, viajada,para despues encarrilar su vida hacia lo q ella decida,definitivamente si es mi espejo.bSITOS.
Muy buena la comparación Lammama, efectivamente nos vemos reflejados en nuestros hijos, pero es un espejo donde no te ves exactamente igual.
Mi hijo Jesús, el mayor, se parece muchísimo físicamente a mi familia, cuando nació era una calcomanía de mi hermano y ahora es tan parecido a mi, que parece mi clon pero con el pelo rubio.
En cambio su caracter y personalidad es idéntica a la de su abuelo paterno, incluso los gestos que hace y eso que por circunstancias de la vida, tampoco es que haya pasado mucho tiempo con sus abuelos paternos, porque mi ex, casi nunca lo lleva a casa de sus padres, queja continua de mis exsuegros.Lo que son los genes.
En cambio la pequeña Lucía físicamente tiene gran parecido con mi suegra, sobre todo cuando se rie, y de personalidad todos dicen que ha sacado el genio de su abuela paterna y de su madre (ja,ja,ja), y la alegría de su abuela materna y abuelo paterno. Ya veis si es mezcla.
Estoy totalmente de acuerdo con laura, no podemos proyectarnos en nuestros hijos, tenemos que dejarlos que cometan sus propios errores, y que tomen decisiones por si mismos, los padres estamos para guiar a nuestros hijos y orientarlos en cuanto a su futuro pero no para imponernos, ni pretender que hagan realidad nuestros sueños.
Otro espejo muy sorpredente es la pareja, dos personas criadas en dos familias diferentes, en distintos ambientes, con experiencias vitales diferentes en muchos caso, y que al final muchas veces terminan pareciendose, teniendo reacciones parecidas...
Millones de besos a todas y feliz año nuevo
Me ha gustado mucho el post de hoy... muy tiernito!!
Un post muy bueno Elena. Es cierto que nuestros hijos son como unos espejos en los que nos vemos reflejados en nuestro estado puro, aunque ya no quede apenas nada en nosotros de aquél estado.
Físicamente mis hijos son un calco mio y de mi familia. Sobretodo Pyrene, que hasta tiene el hueco entre las palas como yo jajaja. Recuerdo una vez que se despertó de la siesta y cuando fui a buscarla a su habitación el corazón me dio un vuelco. Me vi a mi, exacta, igual a cuando tenía cuatro años (lo sé por las fotos claro), aunque su manera de ser...no sé con quien identificarla....es tan dulce y tan buenecita....tan fácil de convencer y tan responsable....de verdad que no sé a quién ha salido.
Sin embargo Tristán es un calco de mis hermanos. Físicamente es igual a mi hermano pequeño (incluyendo el lunar de la mejilla que ahora mi hermano se tapa con las patillas) y el temperamento calcado a mi hermano mayor ,hasta tiene gestos suyos.
Pues a Sara nadie le saca parecido... salvo yo, que digo que aunque el primer pronto pueda parecerse algo a Nestor... yo la veo como mi hermano cuando era pequeño. Ya cuando nació, lo dije: es igual que mi hermano cuando era bebé. Ahora, para cosa misteriosa cada vez que la grabo con la cámara de vídeo como es antigua, la imagen que ves en el visor la ves en blanco y negro... ahi la veo igual que era mi padre. Más de una vez he apartado la vista del visor para verla directamente... y parece que sea otra persona... ¿A que da yuyu? pues a mí no...
En carácter... yo creo que es como mi madre... muy buena, muy sensible,... muy marujilla, muy ordenada, muy inteligente, muy cariñosa y sobre todo... siempre con la sonrisa en la boca. Y pelin tímida... que esto si que no sé de dónde lo ha sacado...
Me resulta dificil verme reflejada en ella. Ella es infinitamente mejor que yo. Lo que me hace inmensamente feliz.
1) A mí siempre me gustó mucho más el laberinto que los espejos deformantes... ¡¡¡te subía la adrenalina...!!!
2) Me gusta mucho esa foto.
3) Los espejos de las tiendas están levemente inclinados, de forma que nos vemos más delgadas de lo que realmente somos.
4) El cierzo es lo que tiene.
5) Pocas cosas tan asombrosas con mis hijos como ese descubrimiento de los parecidos. Podría contaros cosas sorprendentes hasta el extremo, cosas que yo he recordado hacer de pequeña al vérselas a Carlos (por ejemplo, la manía de no empezar un bocadillo de jamón de York sin antes haber recortado con los dientes todo el sobrante -de jamón- que sobresale del pan). Él se parece horrores a mí y mi hija, a su padre (en ella llaman más la atención muchos gestos, detalles de la expresión que son idénticos a los de él y que no provienen de la imitación porque, aunque se ven a diario prácticamente, estamos separados desde hace más de tres años).
6) Feliz, feliz 2009. Te deseo lo mejor del mundo. A ti y a tus tres soletes.
7) ¿¿¿No podías quitar lo de la "verificación de palabra" para los comentarios??? Se agradecería...
feliz año lammama y a todas!! q el 2009 os traiga montoes d alegría.besitos
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Yes, horse racing does have its problems and challenges, but it also has a lot going for it. It's the only sport offering legalized wagering in the majority of the United States and across most of the world. Why it's even legal to bet on horse racing in China where basic human rights are hard to come by.
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In a sport that is not only highly competitive but relies on high-stakes gambling to sustain itself, some people feel it is unlikely that a practice shown to be a disadvantage would continue. However, such cruelties exist and many countries are taking strong steps to stop it. Like in India for example, it is banned, that is until the jockey has proven himself.
In the 131 years that have passed only 11 horses have managed to accomplish what is arguably the most difficult feat in sports. Compared to the Triple Crown, no-hitters in baseball are an everyday occurrence; back to back championships in other sporting events, a dime a dozen; there have been more solar eclipses in our lifetime than Triple Crown winners and each year more people are struck by lightening than the total number of Triple Crown winners in history.
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On paper, Barbaro is the horse to beat, and after his decisive win at the Kentucky Derby, he appears capable of beating all comers. But this is horse racing and no matter how it looks on paper we still have to run the race.
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