Os podéis imaginar los comentarios... la mayoría son educados incluso cuando son críticos y al fin y al cabo en cuestión de gustos no hay nada escrito. Pero me pregunto si yo tendría narices de dejarme fotografiar para un blog para que comenten mi look y exponerme a todo tipo de críticas, respetuosas y no tanto. Supongo que quien lo hace está muy segur@ de si mism@ pero supongo que hace falta algo más. Yo a estas alturas de mi vida tengo ya muy pocos problemas de autoconfianza, por no decir ninguno. Pero siendo consciente de mis defectos, que los tengo y muchos, no estoy muy segura de que mi confianza fuera tanta como para exponerme así en público.
Y me da por pensar, al fin y al cabo, ¿no es lo que hacen los famosos a todas horas? ¡qué angustia! salir a la calle sabiendo que te puedes encontrar un paparazzi en cualquier rincón atento al más mínimo fallo en tu pelo, en tu vestuario... tener que ir continuamente metiendo barriga y sacando pecho cual Ana Obregón... y al fin y al cabo, ¿qué es el estilo? ¿quién dice lo que queda bien o mal? ¿por qué lo que a mí me parece precioso al de al lado le parece un horror y al revés?
entonces... ¿por qué tanta afición a comentar, juzgar y criticar las pintas del de al lado? y ¿qué sabemos nosotros de él/ella? de si ha pasado buena o mala noche, de si ha tenido tres horas para arreglarse con mimo o tres minutos para un apaño exprés. Y sin embargo, que tire la primera piedra quien esté libre de pecado... ¿cuántas veces al día diremos aquello de: "¡Vaya pintas lleva esa/e!" o en el mejor de los casos "¡wow, qué estilazo!"? incluso, todo queda en casa... ¿cuántas veces os ha pasado lo de alabar el look de alguien que pasa por al lado y que vuestro compañer@ de paseo os mire sorprendido opinando que le queda fatal de los fatales o que la combinación es espantosa.
Entonces, ¿qué es el estilo? ¿se nace con él? ¿de verdad hay gente que siempre, siempre, siempre va monísima y gusta a todo el mundo?